No se puede evitar dar la vuelta, ver
el pasado e intentar recuperarlo, intentar cambiar algo. Porque a veces
quisiéramos modificar el modo en el que las cosas han sucedido. Pero lo que somos ahora lo debemos al pasado, a
cada una de las cosas que han ocurrido, que nos han hecho más fuertes, más
conscientes de que en un segundo todo cambia, todo se desvanece.
No se puede evitar girarse y ver
pasar tus sueños. Puedes resignarte, rendirte, quedarte parada, inmóvil,
obviando que para ti tienen algún sentido o lo tuvieron o puedes luchar, saber que hay otros caminos pero que este es el tuyo, que es tu
destino ser fuerte.
2 comentarios:
:')
Me parece bien, hay que seguir. El miedo paraliza. La vida conlleva desdichas y alegría, de eso se trata. ¡Muy buen blog!
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